Por Dr. Alonso Cascante Arias
“Se han elaborado leyes para sostener el derecho al máximo estándar de salud alcanzable pero numerosas organizaciones, instituciones y gobiernos aún están explorando sus implicaciones y su puesta en práctica. El derecho a la salud no es algo estático, sino que sigue evolucionando a medida que se progresa en el campo de la ciencia y la tecnología. Las enfermeras han de realizar una contribución decisiva a este proceso puesto que poseen el razonamiento científico y las bases filosóficas necesarias, además de estar cerca del paciente, la familia y la comunidad” (Consejo Internacional de Enfermeras, 2018)
De esta manera, el Consejo Internacional de Enfermeras justifica por qué las enfermeras y los enfermeros deben interesarse en el enfoque del derecho a la salud con respecto al acceso a la atención sanitaria, planteado por esta, la más importante organización de Enfermería, como eje temático para este 12 de Mayo, Día Internacional de la Enfermera bajo el lema: Enfermería, Una voz para liderar: la Salud es un Derecho Humano.
A pesar de ello, el llamado en Costa Rica no es del todo nuevo, en la Política Nacional de Enfermería 2011-2021 ya se planteaba como política la “Intervención de enfermería en el mejoramiento de la calidad de vida de la población costarricense, participando en la gestión de la rectoría de la salud según las necesidades de la población.”
Asimismo, más allá de lo escrito, Enfermería también ha sido un líder exitoso, muchas veces silencioso y modesto, en facilitar que las personas que habitan en este país puedan acceder a la salud.
Por mencionar algunos ejemplos, tesoneramente Enfermería ha estado presente y muchas veces con la batuta en mano en: vacunación y erradicación de enfermedades por ese medio; visitas domiciliares; mejorando los indicadores en salud como los materno-infantiles; previniendo, detectando y conteniendo infecciones intrahospitalarias; brindando constante educación en salud y en general, como el importante primer contacto entre las personas y el sistema de salud.
Sin embargo, aún faltan áreas en las que Enfermería no ha dado el siguiente paso y a pesar de contar con habilidades, competencias y experiencia, no es más que un engranaje, vital, pero engranaje al fin.
Enfermería tiene mucho que aportar a la sociedad costarricense fuera de los ámbitos hospitalarios y fuera del contexto de la enfermedad, aún faltan enfermeras y enfermeros liderando hogares para personas adultas mayores, llevando sobre sus hombros organizaciones no gubernamentales, profesionales del cuidado en escuelas y colegios, empresas de cuido con un fuerte compromiso ético y de responsabilidad social, líderes en investigación, enfermeras y enfermeros en política, activistas de Derechos Humanos, ambiente y salud.
Es cierto que esos liderazgos no son fáciles de alcanzar, pero Enfermería es un músculo fuerte y sano que con esfuerzo, unión gremial y dedicación puede lograr lo que otros le dicen es imposible.